Mi corazón

Mi corazón se ha debido desparramar por todo mi cuerpo. Y es que noto su latido en cada trozo de mi piel. Ahora en el brazo, ahora en el muslo, luego en la mejilla… Está tañendo a todas horas. Tanto que a veces tengo que agarrarme al suelo porque todo en mí retumba. ¡Pum!, ¡PUm!, ¡PUM!…

Puede que intente llamar mi atención, que quiera decirme algo. Alguien me contó una vez que debía aprender a escucharlo, pero entonces me pareció una cursilería barata de powerpoint encadenado. Ahora dudo por miedo. 




Porque cuando alguien quiere decirte algo y no le escuchas al final se acaba callando.

Por Ormuz




Comentarios