Mejor no le busquen el sentido.
"En una noche cocida me siento alzado por los inconmensurables paralelismos intensos que emergen de la luna azul de junio. La separación es un plato tan amargo que litros y litros de dulce aroma no ocultarán el desagradable olor que desprende esta habitación húmeda.Viendo, horizontalmente, el negro Marshall y la calavera blanca recuerdo aquellos años de camisas militares y botas de niños pijos de 2º de C.O.U.. Las gafas de sol transparentes ahora no sirven para posar y sólo se utilizan en la noche helada. La emoción de esta situación ha llegado a tal extremo que el sonido se puede ver y lo visible se oye.El número 1 colgado de la pared blanca y los nombres de los meses en idiomas de diferente pronuciación me hacen recordar el boiled egg de mi infancia mientras albergo la esperanza de recuperarlo a costa de una consistente recopilación de obras de frenéticos psicópatas que ahora se encargan de abrirme las puertas.Mientras algunos escuchan música en sus casas, otros pasean por la triste ciudad que se envuelve en un manto de tantos colores que se ha vuelto negra. Otros duermen arropados por los sueños insólitos de una inesperada tarde calurosa de invierno frío. Y yo, tumbado, desfasando como nunca lo he hecho, sin poder ver lo que divulgo, no entiendo que la locura humana pueda llegar a un punto en que se vuelva cuerda. Cuerda que ata los extremos de la cordura y los une para alcanzar la inquietud tranquila de la vida muerta."
Por Ormuz.
(Fecha de publicación real en anterior espacio: 23-Feb-07 a las 10:46)
"En una noche cocida me siento alzado por los inconmensurables paralelismos intensos que emergen de la luna azul de junio. La separación es un plato tan amargo que litros y litros de dulce aroma no ocultarán el desagradable olor que desprende esta habitación húmeda.Viendo, horizontalmente, el negro Marshall y la calavera blanca recuerdo aquellos años de camisas militares y botas de niños pijos de 2º de C.O.U.. Las gafas de sol transparentes ahora no sirven para posar y sólo se utilizan en la noche helada. La emoción de esta situación ha llegado a tal extremo que el sonido se puede ver y lo visible se oye.El número 1 colgado de la pared blanca y los nombres de los meses en idiomas de diferente pronuciación me hacen recordar el boiled egg de mi infancia mientras albergo la esperanza de recuperarlo a costa de una consistente recopilación de obras de frenéticos psicópatas que ahora se encargan de abrirme las puertas.Mientras algunos escuchan música en sus casas, otros pasean por la triste ciudad que se envuelve en un manto de tantos colores que se ha vuelto negra. Otros duermen arropados por los sueños insólitos de una inesperada tarde calurosa de invierno frío. Y yo, tumbado, desfasando como nunca lo he hecho, sin poder ver lo que divulgo, no entiendo que la locura humana pueda llegar a un punto en que se vuelva cuerda. Cuerda que ata los extremos de la cordura y los une para alcanzar la inquietud tranquila de la vida muerta."
Por Ormuz.
(Fecha de publicación real en anterior espacio: 23-Feb-07 a las 10:46)
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